Tengo la habilidad perfecta de pensar de más y sufrir así mucho más las cosas. Soy aquel que no hace algo sin querer o, por lo menos, sin pensar. Lo que pasa es que este castigo lo voy a llevar siempre a cuestas y sí, me cuesta. Dormir pensando que me tengo que despertar para después despertarme pensando en todo lo que va a pasar como si alguna vez hubiese tenido la habilidad de prever algo.
No existen ciertos manejos. Lo que sí existe es la realidad, lo nuevo y lo viejo y lo que se va a renovar. Hoy siento mucho y pienso a raíz de ello. Hoy lloro por el castigo y pienso que pensar en no pensar, es seguir pensando y yo lo que quiero es volar... prefiero volar (8)
Pero nadie voló tirándose de un edificio. Se pensó en eso y se llevó a cabo el invento del avión que hoy nos eleva y traslada. Por eso tengo que usar mi castigo a pensarlo todo como el proyecto del avión que estoy construyendo llamado vida. Ya me estrellé varias veces y NO PIENSO en dejar de hacerlo. ESO es lo único que me enseña mis errores.
Voy a sufrir siempre un poco, capaz hasta me guste. Decidir esto es casi tan difícil como no decidirlo y hoy se me escapa una lágrima sin pensar...
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